Como decía anteriormente, la sociedad cristiana medieval era
una sociedad básicamente agrícola, ganadera y guerrera que complementaba
sus ingresos con el comercio y la industria. Y estos dos apartados fueron ganando
poco a poco espacio a los anteriores, sin gran aparato, pero modificando la
sociedad de una manera total y absoluta.
Las continuas guerras y las pestilencias (Llamaban así a
todo tipo de epidemias, tanto de peste como de gripe, viruela, ántrax o
cualquier otra enfermedad contagiosa), provocaron una falta de mano de obra que ya
no podían cubrir las bestias domésticas y además, el mayor esfuerzo
productivo de estos animales era absorbido por la guerra. Este desequilibrio solo pudo ser cubierto con
la aparición de las grandes máquinas hidráulicas. Se fueron construyendo cada
vez más molinos, cada vez más grandes y eficientes.
Aparecieron los martillos
de forja y ferrerías, las fábricas de papel y paños, inmensos molinos que
represaban ríos hasta entonces navegables y forzaban a modificar las conductas
y los esfuerzos económicos en busca de otros mercados. La navegación fluvial
perdió fuerza y pujanza para mayor provecho de la marítima. Las armas
y herramientas de hierro y acero se produjeron de manera más rápida y eficaz, a
la vez que aumentaba su calidad.
Se inició por primera vez una época de sobre producción, donde
las potentes villas elaboradoras de paños o papel eran capaces de producir mucho
más de los que eran capaces de consumir. Los reinos cada vez más amplios y con
una monarquía cada vez más poderosa, menos sacudidos por las guerras, eran capaces de
crear -quizás por primera vez desde la caída del imperio romano- un excedente
de comida.
Por otra parte, los avances en la conservación de alimentos
(salazones, ahumados, etc.) hicieron posible el realizar viajes cada vez más largos y los excedentes en la producción de materias primas y manufacturas hicieron que fuera rentable el recorrer mayores distancias para abastecer nuevos mercados.
Así, se inició una
carrera marítima que cambiaría el mundo sin que los cronistas de la época se
dieran cuenta. Una hambruna o un peste, la muerte de un rey o una gran batalla
si eran dignas de ser cantadas en las crónicas, pero ¿qué cronista se iba a molestar en escribir en sus crónicas la instalación de otra fragua en la rivera del río que bañaba su villa, o a la llegada de una nueva bataneadora hidráulica?
Así, silenciosamente, moría la edad media con sus caballeros y comenzaba, sin que
nadie lo advirtiera, la edad moderna, la edad de los comerciantes y el arte
considerado como expresión de riqueza y ocio de la élite civil.
6 comentarios:
Hola buenos días, he leído en estos días TODAS las entradas de tu Blog y qué decir, siendo yo un apasionado de la historia de la baja edad media, me quito el sombrero. Me gusta mucho el tema de la guerra medieval y sobre todo la Guerra de los Cien Años y hecho en falta más material en Español (y autores Españoles) sobre estos avatares. Por eso te pido un post sobre bibliografía (a poder ser online) sobre el tema de los banderizos en Navarra (de donde soy xD) y territorio peninsular, ya que estoy bastante "pez" en el tema xD.
Un saludo y ánimo con el Blog!!
Bueno Mario, debo de reconocer que me has impresionado, porque leerse todas las entradas del blog seguidas tiene su mérito.
Respecto a la bibliografía que me pides, trataré de compalcerte, pero dame tiempo. Yo soy más de papel que de internet y tendré que buscar tiempo para poder hacer un listado eficaz de documentos banderizos.
De momento, te recomeindo dos que creo son imprescindibles. Uno lo puedes encontrar en este mismo blog, me refiero, claro está, a La istoria de las Bienandanzas e Fortunas (http://parnaseo.uv.es/Lemir/Textos/bienandanzas/Menu.htm). En segundo lugar, recomendarte Iturriak, del archivo general de Gipuzkoa (http://www.artxibogipuzkoa.gipuzkoakultura.net)
Con esto tienes para unos días y me das tiempo para rebuscar en mis archivos.
Gracias y un saludo.
Jejeje, no los he leído seguidos, pero casi... La verdad es que es un tema que me apasiona y en el que fundo algunos de mis pocos dineros, cosa extraña en una persona de mi edad.
Miraré los enlaces que me has pasado y por eso del toma y daca te paso dos interesantes:
-Una clientela militar entre la Corona de Aragón y Castilla a fines del siglo XIV , sobre las mesnadas del Conde de Denia y Ribagorza http://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=2161067
-El Victorial, o Cronica de Pero Niño , una ""bliografía"" sobre un noble más o menos contemporáneo a los hechos de tu libro
http://books.google.es/books?id=FRX6k825zfwC&hl=es&pg=PR6#v=onepage&q&f=false
-Y estos dos últimos son de historia material: sepulcros y efigies de hombres de armas europeos: http://effigiesandbrasses.com/
-Miniaturas medievales sobre la guerra:
http://manuscriptminiatures.com/
Creo que tienes para un rato xD
Gracias por leerme, por escribir y por tus aportaciones a este blog, tan mío como tuyo y de todos aquellos que comparten nuestras aficiones.
Leeré con detalle tus enlaces y seguro que disfrutaré con ellos.
Un saludo.
Mario:
He repasado con atención tus enlaces y son realmente interesantes. Un verdadero tesoro para los estudiosos de la época.
Muchas gracias por compartirlos.
Mario:
Este verano he vuelto al Victorial y ha resultado un verdadero tesoro para los aficionados a la verdad medieval.
Espero poder hacer algún comentario al respecto basado en sus anécdotas.
Gracias de verdad por facilitarnos su conocimiento.
Y animo a todos cuantos siguen este blog a repasar las aventuras del bueno de Pero Niño.
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